Desde hace unos años, para mí ya se ha convertido en costumbre quedarme hasta las tantas para la ceremonia de los Emmys. Hasta el punto de que se me haría extrañísimo no quedarme levantada y cambiando el portátil de sitio mil quinientas veces durante las 600 horas que suele durar la ceremonia. Y comentando, por supuesto, que eso siempre es lo más divertido. O prácticamente lo único divertido, si nos encontramos ante una gala tan soberanamente aburrida como la de este año. Y conste que sí, que sé que lo que es la gala en sí todos los años suele ser más bien tirando a larga y a ratos se hace más bien eterna. Pero es que lo de este año ha sido exagerado, in my opinion. Y es que, a excepción del grandioso momento de Julia Louis-Dreyfus y Amy Poehler (que se dejen de tonterías y le dejen a esta mujer organizar la gala entera. Y que le den un emmy, ya que estamos), la gala fue más bien tan entretenida como ver crecer la hierba. Así que menos mal que para algo está twitter, porque si no hubiera sido por esos comentarios tan awesome que hace la gente, no sé cómo habría sobrevivido a las 600 horas que duró todo. Porque sí, me habría obligado a mí misma a verlo, y lo sabéis todos.
No voy a hablar de cada uno de los ganadores, y de hecho ni los voy a nombrar a todos (si queréis saber quién se llevó qué, aquí por ejemplo lo explican muy bien), porque al final esto se acabaría convirtiendo en una especie de lista de la compra, solo que con las palabras Modern Family por todos lados. Y lo siento pero no, que este es mi blog y quiero que sea una especie de happy place donde no se le hace ni puñetero caso a Modern Family (es el mismo mundo perfecto donde Idris Elba es mío y solo mío, por supuesto. Y, eh, si este año han ignorado a Mad Men, algún día le tocará el turno a Modern Family. Y entonces el mundo real será mi mundo perfecto, con todas sus consecuencias. Just saying), que ya sabéis que me agota. Así que sí, el apartado de comedia fue básicamente un "vamos a nombrar a gente de Modern Family", con un par de excepciones nada más. Y por eso no hay mucho más que decir.
Así que mejor me olvido de toda esa parte de la gala y paso al apartado de drama, que fue muchísimo más interesante y también relativamente más justo. Y, sobre todo, mucho más sorprendente, especialmente cuando le tocó el turno a Damian Lewis de recoger su emmy por su papel en Homeland y arrebatárselo a Bryan Cranston. Personalmente, creo que en la mayor parte de las categorías habría estado contenta siempre que no ganaran Anna y Bates de Downton Abbey. Y como me encanta Homeland, y creo que todos los premios recibidos por ella son merecidísimos, pues estoy feliz. Igual que, por ejemplo, me hizo muy feliz el premio de Aaron Paul, al que prefería por encima de Giancarlo Esposito (aunque ambos dos me gustan mucho). Lo que no quiere decir que al mismo tiempo no me dieran pena unas cuantas cosas. Sin ir más lejos, lo que he dicho de que Bryan Cranston se fuera de vacío, aunque a la vez me alegrara por lo de Damian Lewis. O, por ejemplo, también me dio pena que ignoraran así a Mad Men, aunque también es verdad que después de lo pesados que han sido hasta ahora con ella, ya le iba tocando su turno.
Por lo demás, poco más que comentar. Poco tengo que decir de las categorías de miniseries y realities (salvo que esta gente mala malosa volvió a ignorar a SYTYCD y, sobre todo, a esa diosa llamada Cat Deeley, pero bueno, no es que fuera una sorpresa), así que casi que solo voy a hacer un par de apuntes más. Uno, que me sorprendió muchísimo lo guapa que iba Edie Falco, que normalmente no suele ir tan apañada. Dos, que María Margarita (es decir, Ginnifer Goodwin, para los que no veis OUAT) le debería pedir una disculpa a su abuela por robarle las cortinas para hacerse un vestido. Tres, cualquiera que contrate a Sofía Vergara sabe que se va a ahorrar una pasta en micrófonos. Cuatro, que Jonathan de Buffy ande por ahí recibiendo un Emmy por el guión de Game Change me deja muerta del todo. Y cinco, y muchísimo más importante que todo lo anterior: señores de los emmys, superad de una puñetera vez lo de Modern Family.
¡Saludos!
PD: Hoy es lunes, y por tanto es un día feo. Pero ha vuelto Treme, y por tanto es un día muy bonito.
2 comentarios:
Hola.
Por poco que te guste Modern Family (no lo comparto, pero lo entiendo), tendrás que reconocer que sigue siendo más divertida que tragarse el enésimo bodrio de gala donde unos "artistas" se dedican a masturbarse el ego y a autoentregarse unos premios que a cualquier persona razonable le darían risa (como cualquier entrega de premios del mundo del espectáculo, vaya).
Un saludo.
Hombre, un episodio de Modern Family puede ser más entretenido que la gala en sí, pero desde luego que no es más divertido que la gala + los comentarios de la gente (al fin y al cabo, la gracia de estas entregas de premios está siempre en comentarlas en plan patio de vecinas).
En cualquier caso, que quede claro que lo mío con Modern Family no es tanto odio a la serie (más que nada porque soy más de la filosofía de que, si una serie no me gusta y me aburre, no la veo y ya está, soy feliz ignorándola y que sea feliz ella por su cuenta) como el que no paren de dar el coñazo con ella. Acepto un premio, o dos, pero cuando la mitad de la ceremonia de los emmys consiste en Modern Family, Modern Family y más Modern Family, pues entonces es cuando quiero quemar cosas.
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