17 nov 2010

Una Cathy que se despide (temporalmente :P)

Aviso, de aquí en adelante hay spoilers sobre toda la temporada de The Big C, incluido el final.

En agosto, cuando arrancó la primera temporada de The Big C (la leche, se me ha pasado el tiempo volando), ya comenté por aquí que cogí la serie con muchas ganas pero con algo de miedo. De hecho, a pesar de lo bien que pintaba y que a la larga era casi seguro que le iba a echar un vistazo, me lo pensé más de una vez. Qué le voy a hacer, es que a mí estos temas me dejan muy mal cuerpo.

Al final me animé y le di su oportunidad. Y tengo que decir que no me arrepiento en absoluto.


Y es que, si la serie empezó ya con buen pie pero sin ser nada excesivamente sorprendente (todo lo que nos mostró al principio no era nada que no se nos hubiera mostrado antes en trailers y demás), poco a poco ha ido creciendo. Sin prisas, pero sin pausa tampoco. Y, sobre todo, ha ido haciéndose su hueco, marcando su propio estilo y su propio ritmo.

Al principio, o más bien casi todo lo que hubo hasta llegar al último tramo de la temporada, hizo suyo un tono mucho más ligero y agradable de lo que el tema de la serie podría dar a entender. Y yo lo agradecí y mucho. Nos dio tiempo para hacernos a los personajes, para hacernos a sus tramas. A algunos sé que les costó un poco entender a Cathy, o más que costarles, directamente no entendieron que Cathy no le dijera a nadie que tenía cáncer y quizá por ello se descolgaron un poco de la serie. A mí, en cambio, en ningún momento se me hizo difícil entenderla, y pude disfrurar un montón de esos capítulos.

Fue entonces cuando llegó el drama. Porque si algo dominan perfectamente en esta serie es eso de hacerte pasar de la risa al llanto en tres segundos y medio. Los últimos cuatro capítulos han sido una muestra muy buena de ello. Por ejemplo, en el penúltimo episodio (que si no hubiera visto el final de temporada, que me ha encantado, lo habría aceptado perfectamente como cierre temporal), después del suicidio de Marlene, cuando Cathy se queda tumbada en la cama mirando las fotografías del techo, es muy difícil (por no decir imposible) que no se te escape alguna lágrima. Claro que entonces llegas al final de temporada, con esos últimos minutos finales, y el final del capítulo anterior te parece poca cosa. Si es que ya sabía yo que tenía que haberme hecho con provisiones de kleenex en cuanto escuché el principio de la canción...


Me suena que ya lo he dicho por aquí, o por twitter, o a saber dónde, pero a mí me pueden los momentos (en un libro, en una peli, en una serie...) de ponerse a llorar y no parar. Me gusta pasarlo mal, qué le voy a hacer. Así que este final de temporada, estos últimos minutos, me llegaron especialmente. Claro que lo difícil sería que no lo hubieran hecho.

Resulta curioso pensar la manía que empecé teniéndole a Adam, el hijo de Cathy, y que sea precisamente una escena suya la que hiciera que fuera empezar a llorar y no parar. A cada cual lo suyo, eso sí, tengo que decir que Adam me ha ido ganando con el paso de los capítulos. Es verdad que empezó siendo un niñato de cuidado, pero poco a poco fui capaz de ir entendiéndole, de ir viendo que tenía algo de fondo. Y, qué leches, tan mal chico tampoco es. De hecho, ya hace varios capítulos que se me hacía bastante entrañable (cosa que ni de lejos ha conseguido el marido, que es el único personaje al que sigo sin pillarle el punto). Mucho me temía, cuando le dicen lo de su madre y no tiene ninguna reacción, que íbamos a acabar viéndolo derrumbarse antes de que acabara el capítulo. Y no me equivoqué, pero tampoco me esperaba que fuera a ser para tanto. La escena del garaje (donde, por cierto, antes ya había habido otra escena que me hizo llorar como una tonta, en el capítulo en que Cathy deja ahí el coche para el cumpleaños de Adam) es como para no echarse a llorar.

Así, entre lágrimas, me despido de una temporada que he disfrutado como una enana. Me despido temporalmente de personajes grandes, como el médico, como Sean, como Andrea. Como la propia Cathy. Y me despido, esta vez no temporalmente, de un personaje tan enorme como ha sido Marlene. En cualquier caso, me despido con muy buen sabor de boca.

¡Saludos!

PD: También me han gustado bastante los finales de temporada de Weeds y Bored to Death. Les acabaré dedicando una entrada, pero la llorera que me pegué con The Big C le hizo ganársela antes :P.
PD2: Que, a todo esto, me da penica despedirme de las tres temporadas, pero los huecos que me dejan me vienen mejor que estupendamente.
PD3: Digo desde aquí, igual que digo cada lunes por twitter, que soy muy fan del combo Lumen-Dexter en Dexter. Los hay que no pueden con Lumen, ya lo sé, pero a mí me parece un personaje muy bueno, que se complementa muy bien con Dexter, y una evolución para la serie que le viene muy muy bien.

10 comentarios:

Yorch dijo...

Se puede decir que además de ponernos de acuerdo en escribir hoy sobre la serie, hemos pensado casi lo mismo durante la temporada.
A mí el marido nunca se me ha hecho muy insoportable, aunque sí que hay veces que no entiendo sus cosas...

En definitiva, muy buena 1ª temporada con un excelente final, grande Marlene!

Saludos!!

BabyCatFace dijo...

Yorch, mi problema con el marido es que no acabo de verlo con Cathy. Ella es mucha mujer para él :P. Quizá en otro contexto el personaje no me chocaría tanto, y en su defensa hay que decir que algún momento bueno ha tenido, pero aquí es que no lo acabo de entender xD.
Pero bueno, sí que ha sido una temporada estupenda ;).

satrian dijo...

Antes de comenzar la serie temía que siendo de Showtime la hicieran o muy dura, o tomándose demasiado en risa el tema del cáncer y lo cierto es que me ha encantado su aproximación al tema.
La escena de Adam impagable, una maravillosa serie.

Atticus dijo...

Grandioso el episodio, pero GRANDIOSO con mayúsculas. El piloto no estuvo mal, pero lo que ha venido después ya ha sido el recopetín. Si es que no tengo nada que añadir, ya lo has dicho tú todo.

Un telespectador más dijo...

Ha sido una temporada para quitarse el sombrero, y con ese final nos ha calado muy hondo, imposible no llorar a lágrima viva con ese Adam viendo todos los regalos.

Yo al principio tampoco podía con el marido, pero su cambio desde que sabe que tiene cancer me ha gustado.

Y qué decir de Marlene...se merece una entrada para ella sola, y prometo escribirla, pero antes aun debo hablar de la serie como se merece.

Saludos!

BabyCatFace dijo...

Satrian, yo también tenía miedo de que fueran a tratar el tema de cualquier otra manera, pero al final lo han hecho estupendamente. Y lo dicho, la escena de Adam es impresionante.

Martinyfelix, yo creo que la serie ha ido creciendo a lo largo de la temporada, en parte porque hemos ido conociendo a los personajes y entendiéndolos mejor. El piloto me pareció bueno, pero la serie ha ido yendo a mejor ;).

Telespectador, mi problema con el marido creo que, más que el personaje en sí (estos últimos episodios no ha estado mal, por ejemplo. Y en verdad son los que valen, porque en el resto lo que hemos visto de él ha sido muy secundario xD), es que no acabo de verlo encajar. No con Cathy, ni en esa familia, ni nada, ni siquiera en la serie en sí. Es como si desentonara un poco con todos los demás personajes.

Natalia dijo...

Acabo de ver el capi, por fin, y ahora entiendo lo del #CryFest :__( Ains, ha sido empezar a sonar esa canción y ha sido un no parar.

La serie a mí me ha ido ganando, al principio me gustaba, sin más, pero últimamente ha sido grandísima. Amo a Laura Linney y son fan incondicional de Marlene.

Y sí, yo también pienso que el marido es bastante insoportable, aunque en los últimos capítulos ha estado mejor. Pero es eso, no me pega con Cathy (me pega más su personaje en Bored to Death xD).

BabyCatFace dijo...

Lynx, creo que aún no sé de nadie que haya aguantado el final sin llorar (y eso que la seguimos unos cuantos) xD. Yo no había llorado tanto en mucho tiempo.
Con el personaje del marido yo creo que lo que les ha pasado es que se equivocaron al principio en el planteamiento y, cuando han empezado a darle algo de fondo, como en los últimos capítulos (que la verdad es que ha estado bastante bien), ya no les ha quedado tiempo. A ver si para la segunda temporada lo solucionan un poco.
Pero vamos, que sí, que me pega mucho más en Bored to Death xD.

Celiamayo dijo...

Yo creo que Adam no reacciona cuando sus padres le cuentan lo de la intervención, porque cree que es algo menor. Es al ver todos esos regalos cuando se da cuenta de que su madre no espera sobrevivir. Me pegue una panzada a llorar con el fin.
No podría estar más deacuerdo, me encantan las historias agridulces. Con ese motivo tuve una buena época donde me hice adicta a las series koreanas. No he visto finales más tristes en mi vida.

BabyCatFace dijo...

Celiamayo, estoy muy de acuerdo contigo en lo de Adam, yo también lo vi así. De hecho, el otro día me comentaban que era impresionante ver el paso de él pasando de todo y haciéndose el fuerte a derrumbarse en la escena del garaje. Y a mí precisamente me pareció todavía más intenso ese momento porque yo en ningún momento lo vi haciéndose el fuerte, sino más bien no siendo consciente de la gravedad de la situación. Y cuando se da cuenta y es consciente es cuando ve todo lo que su madre ha preparado teniendo en cuenta que no va a estar ahí, se da cuenta de que va en serio, y evidentemente se asusta y se derrumba.
Miedito me da a mí lo de las series koreanas xD. Ya me han recomendado unas cuantas, pero estoy viendo que como empiece no paro, y bastante falta de tiempo ando ya xD.